La Biblioteca de la Asociación Manuel Azaña cuenta entre sus fondos con una importante hemeroteca. Las publicaciones periódicas: revistas, periódicos, boletines, etc., ocupan un amplio espacio en las estanterías y se cuenta con ejemplares de gran valor y antigüedad, con los que se configura un fondo de publicaciones muy en consonancia con el fin que posee la biblioteca de la Asociación.
Hoy queremos hablar de una de las publicaciones de las que tenemos más números, Revista de Occidente, aún editada en nuestros días y que fundó el filósofo José Ortega y Gasset en el año 1923. La valía de sus páginas viene dictada por el amplio abanico de colaboradores que, a lo largo de sus muchos años, han hecho que se convirtiera en uno de los medios de referencia, dando cabida no solo a artículos de escritores, filósofos, pensadores, ensayistas, etc., sino también a las viñetas de artistas de reconocido prestigio como: Maruja Mallo, José de Almada, Rafael Canogar o Eduardo Chillida.
En la Biblioteca contábamos ya con un fondo bastante amplio y gracias a una magnífica donación de la biblioteca personal de Mario J. Bonilla (de la que ya hablaremos más adelante, puesto que está en fase de precatalogación) hemos conseguido que la colección de Revista de Occidente llegue ya a los 211 volúmenes, que abarcan todas las épocas de la revista.
Para una publicación que cumple casi cien años de historia, es muy importante que tracemos un breve recorrido por sus diferentes épocas, ya que no hablamos de una publicación lineal, sino de varias etapas, años sin publicarse, cambios de numeración, etc.
Como dijimos al principio del artículo, la Revista de Occidente sale a la luz en julio de 1923. Estamos ante la primera época, dirigida por el propio Ortega y Gasset, que posee en total 14 años de publicación y cesa con el número 157 en julio de 1936, a causa del estallido de la Guerra Civil. En esta época se sientan las bases de la revista y encontramos colaboradores de la talla de: Gregorio Marañón, Ramón Gómez de la Serna, Franz Kafka, Dámaso Alonso, Corpus Barga o Rafael Alberti.
La segunda época arranca de nuevo con el número 1, en abril de 1963. También siguen contándose los años de la revista, pero en 1969 desaparece la designación de segunda época y el año. Está dirigida por José Ortega Spottorno y en esta época como novedad vemos que van a ir apareciendo números monográficos. Esta fase de la revista acaba en octubre de 1975 con el número 151.
En la tercera época, que cuenta con 23 números y abarca desde noviembre de 1975 a agosto-septiembre de 1977, se produce un cambio de formato y de los 21 cm. de octavo mayor con que salió orginariamente, se pasó a un formato más largo, de 28 cm., que desaparecerá cuando después de un periodo de inactividad en 1978 y 1979, vuelva a ver la luz otro nº 1 en abril-junio de 1980, es decir, con una periodicidad trimestral y bajo la dirección de Soledad Ortega Spottorno, que en 2007 será relevada en el cargo por José Varela Ortega. Es importante resaltar que a partir de 1980 la Revista de Occidente es publicada por la Fundación José Ortega y Gasset. En varios números de los aparecidos entre 1980 y 1985, aparecerá la designación de “Número extraordinario” y éstos llevarán su propia numeración.
Como hemos visto, estamos ante un reto para el bibliotecario, ya que contamos con una publicación periódica abierta, que posee a lo largo de su trayectoria cuatro reinicios de su numeración, que cambia la periodicidad varias veces y que posee periodos de ausencia. Su importancia para la formación crítica y cultural de los lectores no puede olvidarse, ya que a través de sus páginas fue posible leer las primeras traducciones al español de autores hasta entonces inéditos en nuestra lengua. Fue, sin duda, una gran fuente de inspiración en épocas tan marcadas como el final del franquismo o la Transición.